La necesidad de comunicar y compartir con los demás nuestras experiencias es una de las esencias del ser humano. Necesitamos sentirnos acompañados de nuestros seres queridos y comentar con ellos nuestras peripecias vitales, nuestras dudas, nuestras ilusiones y sueños. Por eso, las comunicaciones móviles son tan importantes en estos momentos de distancia social, necesaria en la batalla contra una pandemia tan cruel. La tecnología nos ayuda y va a ser una palanca de recuperación para superar las dificultades actuales. Empezando por el 5G, una revolución muy útil que dará un empujón definitivo a la transformación digital de la sociedad, nos traerá nuevos servicios e impulsará un salto en la automatización de la industria y la logística.
El estándar 5G conllevará una densificación de las redes de comunicaciones, con micro antenas ubicadas en el mobiliario urbano, lo que permitirá ofrecer al ciudadano la posibilidad de acceder a contenidos, aplicaciones y servicios de valor añadido con mínima latencia. Aplicaciones como las relacionadas con el consumo de bienes y servicios, ocio, turismo y las relaciones del ciudadano con su administración se verán sensiblemente mejoradas. La Smart city comenzará a ser una realidad palpable.
Pero la revolución 5G no será sólo un fenómeno urbano, sino que también ayudará a reducir la brecha digital entre la ciudad y el campo. La nueva tecnología permitirá ampliar la cobertura de banda ancha a velocidades altas en zonas rurales y aisladas, contribuyendo a la dinamización del sector agrícola y de la industria de proximidad y poniendo al alcance de la población aplicaciones y servicios. La agricultura inteligente tendrá un aliado para hacer más eficiente la producción, reducir el consumo de agua y fertilizantes y hacer frente al cambio climático.
La logística, uno de los sectores más dinámicos, será otro de los grandes beneficiados. La tecnología 5G permitirá a las empresas la geolocalización y monitorización de todos sus activos en tiempo real en un almacén o fábrica, así como durante su envío o distintos recorridos, favoreciendo así el comercio online y la experiencia tanto del operador logístico como del cliente final.
Industria 4.0 y movilidad sostenible
La denominada Cuarta Revolución Industrial (Industria 4.0) se consolidará con el 5G, que incluirá el despliegue de redes de comunicaciones privadas dedicadas específicamente a cada segmento o actividad. Las industrias se beneficiarán de unas comunicaciones seguras y garantizadas y mejorarán su rendimiento, uniendo elementos como la inteligencia artificial (IA) y el desarrollo de procesos robotizados. Todo ello contribuirá también a que sean más limpias y contaminen menos.
El fomento de la movilidad sostenible es un objetivo prioritario de la sociedad para reducir la huella de carbono y mitigar los efectos del cambio climático. En este campo, la aportación del 5G es disruptiva. El vehículo conectado permanentemente con su entorno (vía, semáforos, otros vehículos) redundará en una movilidad segura y eficiente. Esto será posible entre otros factores por la baja latencia que garantiza el 5G, reduciendo a prácticamente 0, el tiempo de respuesta frente –por ejemplo– a una posible colisión. El desarrollo de redes de comunicaciones auto-sostenibles en la red viaria será clave para el desarrollo de esta nueva movilidad.
El mínimo tiempo de respuesta que permite el 5G también permitirá el desarrollo de servicios relacionados con la seguridad. La capacidad de la red servirá para detectar incendios a cientos de kilómetros de distancia y monitorizarlos en todo momento, con la ayuda de drones equipados con cámaras termo gráficas y sistemas de geolocalización muy precisos. Con la aplicación de inteligencia artificial llegaremos a prever cualquier tipo de incidencia, anticiparla y resolverla incluso antes de que se produzca.
La revolución del 5G ya está aquí para ayudarnos a construir un mundo más eficiente, más limpio y también más al servicio del ser humano.